En diciembre de 2024, Atomflot celebró su 65º aniversario. La vasta experiencia acumulada durante décadas se aplica con éxito en la operación de rompehielos, el lanzamiento de nuevos proyectos e incluso en actividades museísticas. Gracias al equipo de Atomflot, la Ruta del Mar del Norte se está volviendo cada vez más atractiva para la logística.
Al servicio del comercio y la ciencia
La flota rusa de rompehielos nucleares, única en el mundo, se acerca a su 65º aniversario con indicadores en constante crecimiento. El rompehielos nuclear universal «Yakutia», la incorporación más reciente de Atomflot, entró en servicio poco antes del Año Nuevo, el 28 de diciembre.
“En nuestra flota de rompehielos nucleares ya tenemos 8 buques. Para 2030, el grupo de rompehielos en la Ruta del Mar del Norte deberá alcanzar las 17 unidades. En noviembre se batió un nuevo récord de tránsito en la Ruta del Mar del Norte, superando 3 millones de toneladas. Ahora puedo afirmar con confianza que hemos alcanzado un nuevo máximo y establecido un nuevo récord en el volumen total de carga transportada por la Ruta del Mar del Norte este año”, declaró Alexey Likhachev, Director General de Rosatom.
Los nuevos rompehielos son esenciales para garantizar una navegación segura en la región de la Ruta del Mar del Norte. En los últimos 10 años, el flujo de carga a lo largo de esta importante arteria ártica ha aumentado casi diez veces y sigue batiendo récords anualmente. En 2024, esta dinámica se mantuvo, con casi 37,9 millones de toneladas transportadas, en comparación con 36,25 millones de toneladas en 2023.
El «Yakutia» es el 3er rompehielos de serie y el 4to en el orden continuo de entrega de los rompehielos del proyecto 22220. Estos rompehielos son los más potentes del planeta, capaces de atravesar hielos de hasta tres metros de espesor. Su funcionamiento está garantizado por dos reactores RITM-200. Cabe recordar que Rosatom planea instalar modificaciones de estos reactores en centrales nucleares flotantes y terrestres de pequeña potencia.
Actualmente, se están construyendo tres rompehielos más. En noviembre del año pasado, se botó el rompehielos «Chukotka». Según la tradición, antes de la botadura fue «bautizado» rompiendo una botella de champán en su casco, simbolizando la espuma del mar.
“Los rompehielos no solo garantizan la navegación en las regiones septentrionales y entregan cargas en las zonas más inaccesibles, sino que también son esenciales para la investigación del Ártico”, declaró la “madrina” del «Chukotka», Elena Shmeleva, Directora de la Fundación Educativa «Talento y Éxito» y Presidente del Consejo de la Entidad Federal «Sirius». También expresó su esperanza de que la exploración científica del Ártico siga siendo una de las prioridades de la estrategia de desarrollo científico y tecnológico de Rusia.
Además, en los astilleros del Báltico en San Petersburgo se está construyendo el rompehielos «Leningrado» del proyecto 22220, mientras que en el astillero Zvezda de Extremo Oriente se trabaja en el rompehielos nuclear Líder insignia del proyecto 10510, con el nombre «Rossiya». En 2025 está prevista la botadura del «Stalingrado», el 6to rompehielos del proyecto 22220.
“Estoy convencido de que la demanda de la flota de rompehielos nucleares crecerá año tras año. La Ruta del Mar del Norte se está convirtiendo en una vía marítima internacional. Estamos demostrando al mundo entero que esta es una ruta de navegación confiable, aunque opera en condiciones de hielo muy complejas. Siempre he dicho que la ruta ártica es el camino ruso hacia la India, y que si queremos tener una posición sólida en el Océano Pacífico y Asia, a Rusia le será difícil implementar sus tareas económicas y políticas clave sin el desarrollo de esta ruta”, declaró Vyacheslav Ruksha, Director General Adjunto de Rosatom y Líder de la Dirección Ejecutiva de la Ruta del Mar del Norte, en una entrevista a una publicación del sector nuclear.
Interés turístico
La singularidad de los rompehielos nucleares y de los lugares donde operan despierta un interés constante entre los turistas, incluidos los extranjeros. Una de las principales atracciones de Múrmansk, la ciudad donde se encuentra la base de la flota de rompehielos de Rusia, es el primer rompehielos nuclear del mundo, «Lenin», que actualmente funciona como museo. En sus instalaciones opera el Centro de Exposiciones del Ártico.
«Lenin» entró en servicio el 3 de diciembre de 1959, fecha que marca el inicio de la historia de Atomflot. En su aniversario en 2024, el casco del rompehielos fue decorado por primera vez con iluminación especial: en los costados, destellos verdes que evocan la aurora boreal, y en la superestructura habitacional, los colores de la bandera rusa.
Por supuesto, los cruceros al Polo Norte también generan un gran interés entre los turistas. Desde 2008, el rompehielos nuclear «50 Let Pobedy” (50 años de la Victoria) realiza estos viajes. En 2024 se llevaron a cabo cinco expediciones, una de las cuales formó parte del proyecto de Rosatom «Rompehielos del Conocimiento». En el Polo Norte participaron estudiantes talentosos de 15 países del mundo.
“Me complace que desde 2019 nuestro rompehielos «50 Let Pobedy» permita a los niños descubrir el Ártico. El proyecto se ha convertido en una iniciativa internacional. Es importante para nosotros mostrar a los jóvenes de países amigos las capacidades de la flota de rompehielos nucleares y la belleza del Ártico”, destacó Vyacheslav Ruksha.
Transporte de carga en la Ruta del Mar del Norte
37,9 millones de toneladas — 2024
36,25 millones de toneladas — 2023
