“Mi sueño es trabajar en Rosatom”
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#296diciembre 2025

“Mi sueño es trabajar en Rosatom”

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Jorge Matheus Pereira participa en el Programa de Embajadores de la Educación Nuclear Rusa (RNEA). Los embajadores son estudiantes extranjeros matriculados en universidades rusas que orientan a futuros estudiantes de otros países y promueven el conocimiento sobre la industria nuclear. En esta entrevista, Matheus habla de su elección profesional, sus estudios en la Universidad Estatal de San Petersburgo y las perspectivas de desarrollo de la energía nuclear en su Brasil natal.

Elegí ingeniería y tecnología y finalmente encontré mi camino en la energía nuclear porque siempre me he esforzado por combinar los estudios de investigación e ingeniería con los objetivos de la cooperación internacional.

Lo que más me gusta es que este campo requiere un enfoque interdisciplinario holístico: los conocimientos fundamentales, el pensamiento tecnológico y la comunicación internacional son igualmente importantes. Me influyeron profundamente las palabras del físico soviético Igor Kurchatov: “La vida humana no es eterna, pero la ciencia y el conocimiento traspasan los umbrales de los siglos”.

Más allá de la ingeniería energética, presto mucha atención a las iniciativas educativas y científicas; sin embargo, la industria nuclear sigue siendo el centro de mi interés profesional. Estoy convencido de que la tecnología nuclear es el futuro, y considero que todo lo que hago fuera de mis estudios principales es una forma de ampliar mi comprensión de la industria y fortalecer la cooperación internacional y la formación del personal.

Estudiar en Rusia

La educación rusa, especialmente en física, energía, química e ingeniería, se distingue por una sólida formación fundamental, un enfoque sistemático y una atención especial a las grandes instalaciones tecnológicas. Además, Rusia posee una experiencia única en la industria nuclear, desde reactores de neutrones rápidos hasta una sólida escuela de físicos teóricos.

La admisión requirió mucho estudio; solo lo conseguí en mi segundo intento. El ritmo acelerado y la terminología científica fueron los aspectos más difíciles de la etapa inicial de mis estudios. El idioma ruso en sí mismo resultó ser un desafío: me sorprendió su sistema fonético y su gramática, a pesar de haber nacido en una comunidad rusa.

Rusia combina tradición y modernidad: respeto por la memoria histórica, atención a la ciencia y la cultura, y una atmósfera especial de hospitalidad en las regiones. ¡Todo en Rusia es magnífico!

Trabajo y proyectos internacionales

Trabajo en el Consejo Coordinador de Organizaciones de Compatriotas Rusos en Brasil. También participo en iniciativas internacionales relacionadas con la energía nuclear y proyectos tecnológicos para jóvenes como el Programa de Embajadores de la Educación Nuclear Rusa (RNEA). El RNEA me ha brindado oportunidades excepcionales, como la participación en importantes foros del sector, contactos con ingenieros e investigadores y la promoción de la concienciación nuclear entre los jóvenes de los países en desarrollo.

Esta experiencia me ha permitido establecer conexiones profesionales, acceder a valiosos programas educativos y formar una comprensión sistémica del sector a nivel internacional. Gracias al programa, participé en el Foro Internacional de la Juventud sobre Tecnologías Nucleares Verdes en Egipto, intervine en el Diálogo Rusia-África sobre Materias Primas, dicté una conferencia en la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ) y asistí a la Escuela Técnica de Obninsk y a la Escuela Internacional de Invierno sobre Radioquímica de la Universidad Estatal de Moscú Lomonosov.

El futuro

La industria nuclear de Brasil está en auge. Actualmente, el país necesita personal capacitado en tecnologías de reactores, análisis de seguridad, ciclo del combustible, ciencia de los materiales e ingeniería de sistemas termofísicos complejos. Al fortalecer la cooperación con Rusia, mi país podría ocupar un lugar mucho más destacado en el sector regional de la energía nuclear.

Dentro de 20 años, me veo como un profesional de la energía nuclear que trabaja en la intersección de la ingeniería, la diplomacia científica y la formación de personal. Mi sueño es trabajar en Rosatom. Me gustaría contribuir a la creación de ecosistemas educativos para la formación de la próxima generación de ingenieros y al desarrollo de tecnologías que mejoren la seguridad y la eficiencia de la energía nuclear. Creo que nuestro futuro es nuclear y sé que Rosatom está haciendo todo lo correcto.

Consejos para quienes eligen el mismo camino

El éxito en el sector nuclear requiere disciplina, capacidad para tomar decisiones basadas en datos y habilidad para trabajar en un entorno multicultural. La voluntad de aprender desempeña un papel importante, ya que la industria nuclear evoluciona muy rápidamente. Las habilidades de comunicación también son importantes, especialmente si el trabajo implica proyectos internacionales y la promoción de la concienciación.

Enfócate en las ciencias fundamentales, aprende idiomas, busca prácticas internacionales, participa en proyectos de investigación y no tengas miedo de las disciplinas técnicas complejas. Y lo más importante, considera la industria nuclear como una trayectoria profesional a largo plazo que requiere responsabilidad y pensamiento sistémico.