
Un paso hacia una nueva era
volver al ContenidoLa Agencia Internacional de Energía (AIE) ha publicado un informe analítico titulado «El camino hacia una nueva era para la energía nuclear». Lamentablemente, el informe no está exento de sesgos e distorsiones: sus autores hicieron todo lo posible por no mencionar la participación de Rusia en el mercado de construcción de nuevas instalaciones nucleares, incluidas las de pequeña escala. Por ello, al analizar este informe, complementaremos sus datos con información sobre la industria nuclear rusa.
Situación actual
A pesar de las omisiones, el informe reconoce que los actores más activos en el mercado de la energía nuclear son Rusia y China, siendo ellos los principales impulsores del desarrollo de la industria. De los 52 reactores que han comenzado a construirse en todo el mundo desde 2017, 25 son de diseño chino y 23 de diseño ruso.
Los países tradicionalmente denominados «economías desarrolladas» albergan la mayor parte del parque mundial de centrales nucleares, pero se espera que, para 2030, China supere tanto a Estados Unidos como a la Unión Europea en capacidad total instalada.
«La renovación de este parque no está siendo fácil: la industria nuclear en los países tradicionalmente considerados líderes del mercado, como EEUU y Francia, ha enfrentado dificultades en los últimos años, con retrasos en la ejecución de proyectos y sobrecostos en la construcción de todos los nuevos reactores de gran capacidad», señala el informe.
Esta frase refleja, como una gota de agua en el océano, el dilema principal de los autores del informe: presentar a Estados Unidos como líder, sin dejar de lado los datos que muestran que Rusia y China han tomado la delantera. Para los autores, esto representa riesgos, pero para aquellos que opten por colaborar con Rosatom, significa una gran oportunidad, ya que la corporación continúa perfeccionando sus soluciones tecnológicas de manera constante.
De los 52 reactores en construcción en el mundo, 23 son de diseño ruso
«A pesar de la sólida posición que hemos alcanzado en el ámbito nuclear, no nos detenemos. Seguimos evolucionando y mejorando nuestro trabajo, tanto en el diseño del equipamiento, garantizando un nivel de seguridad sin precedentes, como en la eficiencia económica de nuestros productos. Actualmente, estamos desarrollando una instalación de reactor para centrales nucleares con mayor potencia, características operativas más avanzadas y mejores indicadores técnico-económicos para su aplicación en Rusia y en el extranjero», declaró Valery Kryzhanovsky, Diseñador General de OKB Gidropress, al comentar el envío del reactor VVER-1000 a la central nuclear india de Kudankulam.
Crecimiento de la capacidad, tanto grande como pequeña
Los autores del informe confían en que la generación nuclear seguirá creciendo en cada uno de los tres escenarios propuestos. El primero, STEPS, supone el mantenimiento de las políticas actuales; el segundo, APS, prevé el cumplimiento de los compromisos asumidos por los países y organizaciones; y el tercero, NZE, establece la meta de alcanzar emisiones netas cero.
«El parque nuclear mundial aumentará en los tres escenarios. En el escenario STEPS, la capacidad instalada crecerá aproximadamente la mitad, pasando de 416 gigavatios (GW) a finales de 2023 a 650 GW en 2050. En el escenario APS, la capacidad se duplicará con creces, alcanzando los 870 GW, mientras que en el escenario NZE superará los 1.000 GW (figura 2.3). En todos los casos, la extensión de la vida útil de los reactores juega un papel clave. Por ejemplo, en el escenario APS, para 2040, aproximadamente 150 GW, es decir, el 20 % de la capacidad global, provendrá de reactores cuya vida operativa ha sido extendida», señala el informe.
En su resumen ejecutivo, los autores ponen el énfasis en los pequeños reactores modulares (SMR): «Con el apoyo del Estado y gracias a nuevos modelos de negocio, los proyectos de SMR con costos competitivos pueden abrir el camino hacia una nueva era de la energía nuclear».
Sin embargo, en el texto principal del informe se reconoce que, a pesar del creciente interés por los SMR, estos no dominarán el sector nuclear del futuro. «Los reactores de gran capacidad seguirán representando la mayor parte de las nuevas instalaciones nucleares en todos los escenarios; por ejemplo, en el escenario APS, entre 2024 y 2050, la capacidad total de los reactores de este tipo superará los 500 GW».
Cabe señalar que, en Rusia, Rosatom tiene previsto construir 38 unidades de gran, mediana y pequeña capacidad, incluidas las primeras de su tipo, en el periodo que va hasta 2042. Su capacidad total será de 29,3 GW. De ellas: 8 unidades de 1200 MW cada una, 7 unidades de 1255 MW, 2 unidades de 1000 MW y 5 unidades de 600 MW.
Por supuesto, también habrá reactores modulares pequeños (SMR). En particular, está previsto el lanzamiento de la primera central nuclear del mundo con un reactor de neutrones rápidos refrigerado por plomo, el BREST-OD-300.
Además, Rosatom trabaja en la creación de unidades de energía flotantes con reactores RITM-200 para el suministro energético del complejo minero de Baim, realizando trabajos preparatorios para el vertido de hormigón en la central nuclear terrestre de Yakutia con una versión modificada del reactor RITM-200, y desarrolla proyectos de SMR con reactores RITM-400 y «Shelf».
Asimismo, Rosatom se convirtió en la primera empresa en la historia en firmar un contrato de exportación para la construcción de una SMR. Seis unidades con reactores RITM-200 serán construidas en la región de Jizzakh, Uzbekistán.
Hasta 20242 se construirán en Rusia 38 unidades nucleares con una capacidad de 29,3 GW.
Finalmente, la central nuclear flotante (PATES) que suministra electricidad y calefacción a Pevek, en Chukotka, confirma que Rosatom ocupa una posición de liderazgo en el segmento mundial de centrales nucleares de pequeña capacidad (SMR).
Crecimiento y disminución de las inversiones
Las inversiones anuales en energía nuclear, que abarcan tanto la construcción de nuevas plantas como la extensión de la vida útil de las existentes, han aumentado casi un 50 % en los tres años transcurridos desde 2020, superando los 60.000 millones de dólares. Según el informe, en cada uno de los tres escenarios previstos se espera un crecimiento de las inversiones globales en energía nuclear y de la capacidad instalada.
En el escenario STEPS, las inversiones en el sector nuclear aumentarán ligeramente, pasando de aproximadamente 65.000 millones de dólares en 2023 a unos 70.000 millones en 2030. Se estima que para 2030, alrededor del 80% de las inversiones se destinará a la construcción de nuevos reactores de gran capacidad, 10% a centrales nucleares de pequeña capacidad (SMR) y otro 10% a la extensión de la vida útil y la modernización de reactores existentes.
Sin embargo, después de 2030, las inversiones anuales en energía nuclear disminuirán, especialmente después de 2040, alcanzando sólo 45.000 millones de dólares en 2050. Los autores del informe atribuyen esta caída a la reducción en la construcción de nuevos reactores en China y a la disminución de las inversiones tanto en reactores de gran capacidad como en SMR.
Inversiones en energía nuclear en el escenario APS y NZE
Según el informe, en el escenario APS, las inversiones en energía nuclear a nivel mundial casi se duplicarán, alcanzando alrededor de 120.000 millones de dólares en 2030, de los cuales aproximadamente 25.000 millones se destinarán a centrales nucleares de pequeña capacidad (SMR). Sin embargo, después de 2030, las inversiones en plantas, tanto de gran como de pequeña capacidad, disminuirán bruscamente, situándose en 60.000 millones de dólares en 2050.
A partir de 2040, más de un tercio de las inversiones en generación nuclear se destinarán a reactores modulares pequeños (SMR). Los expertos de la AIE explican esta disminución por el hecho de que los sistemas energéticos de muchos países estarán cerca de completar su proceso de descarbonización o lo habrán alcanzado por completo para 2050, reduciendo así la necesidad de invertir en nuevas fuentes de generación con bajas emisiones de carbono.
En el escenario NZE, los autores del informe estiman que las inversiones en energía nuclear alcanzarán 155.000 millones de dólares en 2030, para luego disminuir a unos 70.000 millones en 2050. Según el informe, esto se debe a un ritmo acelerado de descarbonización de los sistemas energéticos para 2040.
En todos los escenarios, un crecimiento más rápido de la demanda de electricidad de lo previsto inicialmente podría mejorar la estabilidad de las inversiones en energía nuclear a largo plazo.
Comparación con otras fuentes de energía
Según las estimaciones de la AIE, entre 2024 y 2050, las inversiones acumuladas en energía nuclear podrían alcanzar: 1,7 billones de dólares en el escenario STEPS, 2,5 billones de dólares en el escenario APS y 2,9 billones de dólares en el escenario NZE.
Sin duda, el aumento previsto en el flujo de inversiones hacia la industria nuclear global es una señal positiva. Sin embargo, al comparar estas cifras con las inversiones en otros segmentos del sector energético, resulta evidente que las estimaciones de la AIE reflejan un persistente y extremadamente bajo interés inversor en la energía nuclear.
Por ejemplo, el informe Energy Outlook de BP, publicado en julio de 2024, señala que en los últimos años las inversiones en energía de bajas emisiones han crecido rápidamente. Desde 2019, estas inversiones han aumentado en aproximadamente un 50 %, alcanzando 1,9 billones de dólares en 2023.
Una simple comparación de cifras demuestra que la participación de la energía nuclear en la inversión total en energía baja en carbono en 2023 fue de apenas el 3,4 %. Además, la evaluación de las inversiones en energía nuclear para los próximos 27 años en el escenario STEPS es inferior a la inversión en energía baja en carbono realizada en un solo año, 2023.
Más de 60.000 millones de dólares: inversión global anual en energía nuclear
Recomendaciones en acción
Los expertos de la AIE señalan que, para financiar la construcción de nuevas centrales nucleares, modelos como las asociaciones público-privadas o el financiamiento de proyectos no son adecuados debido a los riesgos asociados con la larga vida útil de las plantas, los altos costos de construcción, el sobrecosto y el prolongado período antes del retorno de la inversión. Por esta razón, es necesaria una sólida participación estatal, especialmente en los proyectos pioneros.
Para reducir los riesgos de sobrecostos, es fundamental contar con una sólida base industrial, garantizar suministros estables y flexibles, aplicar procesos de estandarización y producción en serie, y disponer de personal capacitado.
Rosatom cumple con todos estos requisitos. La Corporación dispone de capacidades de producción propias para fabricar el equipamiento necesario, así como infraestructura de procesamiento de datos y software avanzado para realizar cálculos en el diseño y la ingeniería de reactores, componentes, ensamblajes, combustibles y análisis del comportamiento de los núcleos de los reactores, entre muchos otros procesos clave.
Rosatom: de la innovación a la implementación global
Rosatom desarrolla nuevos proyectos que primero implementa en Rusia, los pone en producción en serie y luego los ofrece a clientes en todo el mundo.
En el segmento de reactores de gran capacidad, un ejemplo clave es el VVER-1200. Unidades con este reactor han sido construidas en las centrales nucleares de Leningradskaya y Novovoronezhkaya en Rusia, así como en Bielorrusia. Actualmente, se están construyendo reactores de este tipo en Rusia, China, Turquía, Egipto y Bangladesh, y próximamente comenzará la construcción en Hungría.
En el segmento de reactores modulares pequeños (SMR), destaca el RITM-200, que lleva varios años en operación en los rompehielos del proyecto 22220 y ahora sirve como base para la creación de unidades de energía flotantes y terrestres de baja potencia.
El siguiente paso es el desarrollo de un modelo de energía dual con un ciclo de combustible nuclear cerrado, basado en reactores de neutrones rápidos de IV generación. «En la próxima década, comenzaremos la construcción de unidades de gran capacidad con esta tecnología en nuestro país y ofreceremos estos proyectos a clientes internacionales», anunció el Director General de Rosatom, Alexey Likhachev, durante el foro «Conocimiento. Estado» a finales de enero.
Rosatom mejora continuamente las tecnologías y materiales para el desarrollo de unidades de energía nuclear y combustible nuclear, incorporando innovaciones como tecnologías aditivas y materiales compuestos. Además, se optimiza la cultura de producción, con mejoras en los procesos tecnológicos y comerciales, muchas de ellas desarrolladas por los propios empleados de la Corporación Estatal.
Por último, se realiza un enorme trabajo en la formación de especialistas cualificados para la industria, un proceso que comienza en las escuelas y, en algunos casos, incluso en jardines de infancia.
Así, lo que los expertos de la AIE sólo recomiendan a su público objetivo, Rosatom lo ha estado implementando de manera continua durante muchos años.